Página 183 - INFORME_SALUD_MENTAL_DPA

Versión de HTML Básico

181
La situación de los enfermos mentales en Andalucía. Abril 2013
12
de su trastorno psiquiátrico y con problemas económicos, sociales o en su
rehabilitación. En muchos casos, problemas que vinculan a un porcentaje muy
alto de drogodependientes.
Para algunos autores el origen de los problemas relacionados con estos
pacientes y sus tratamientos, parte de la hipótesis de la automedicación producida
ante un trastorno psiquiátrico previo (Khantzian, 1985). En otra posición se
encontrarían otros autores que mantienen lo contrario (Miller,1993), entendiendo
el trastorno psiquiátrico como consecuencia del abuso de drogas. A partir de aquí
podemos entender que existen efectos agudos o crónicos de muchas drogas que
pueden provocar cuadros difícilmente distinguibles de trastornos psiquiátricos
como los depresivos, ansiosos y psicóticos; o bien, algunos sujetos con trastornos
psiquiátricos que suelen consumir drogas produciéndose un diagnóstico diferencial.
Con relación a los comportamientos de estos pacientes, podemos
asegurar que la problemática que plantean, en general, viene a situarse en
complicaciones que afectan a las relaciones familiares, existiendo en ellos más
conductas criminales y violentas que en los enfermos mentales (Abram y Teplin,
1991; Safer, 1987) incluso suicidas (Caton, 1981; Drake et al., 1989; Dassori et
al, 1990). En este sentido, el comportamiento va unido también a alteraciones en
éste y en la convivencia con aquellos que son diferentes.
En estos últimos años hemos tenido en la Institución algún caso de
pacientes con claro deseo de autolisis que llegaron a culminar éste. Junto a
éstos, observamos en muchas quejas de personas presas con un diagnóstico
mental y una larga trayectoria de consumo de drogas que cumplirán integras
sus condenas debido a padecer esta patología, o éstas se verán ampliadas
por las constantes sanciones que sufren durante el periodo de internamiento
debido a sus dificultades de adaptación a las normas de los centros. Son
pacientes que cuentan con orden de alejamiento familiar por agresiones en el
seno de ésta. Para otros, la prisión sirve como un elemento de contención para
el consumo y resulta efectivo en el tratamiento de la enfermedad psiquiátrica
y su estabilización, y ello sería eficaz si en los centros penitenciarios existiesen
profesionales formados para atender esta tarea.
Entre las dificultades más importante detectadas con relación al consumo
de drogas en muchos pacientes con trastornos psiquiátricos, podemos encontrarnos
la existencia de una negación, distorsión o que de alguna manera se llega a
minimizar el consumo de drogas, como un aspecto secundario. En otros casos, la
situación que se produce, desde los servicios de Salud Mental, es que no preguntan