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datos disponibles (comicios locales de 2001) también se desprende una
diferencia muy notable respecto al nivel de abstención entre daneses y
residentes extranjeros de terceros países (15% / 60%). En Dinamarca sí
se han detectado en el ejercicio del derecho de sufragio pasivo algunos
casos relevantes de elección de representantes locales de “origen
inmigrante” en aquellas circunscripciones locales con mayor porcentaje
de población extranjera de terceros países y que los mismos se presentan
en mayor número en listas electorales situadas ideológicamente en el
centro-izquierda. Sin embargo, consideramos que estos últimos datos
deben ser valorados con cautela, ya que dentro de ese concepto de
“origen inmigrante” se incluyen a aquellas personas con nacionalidad
danesa pero origen extranjero.
II.4.c) Países Bajos:
El reconocimiento de la participación en las elecciones municipales de
los residentes extranjeros data de 1985. En las fuentes consultadas tan
sólo hemos hallado datos parciales referentes a la participación de las
comunidades de residentes extranjeros más significativas en Holanda
y en las ciudades con una mayor población inmigrante. Teniendo en
cuenta lo anterior, se puede afirmar que en el periodo 1994-2006 la
participación de las personas extranjeras con derecho al voto ha oscilado
entre el 30 y el 40%, mientras que la participación total rondó el 50%.
No se han observado casos de “voto étnico” relevantes y, como en el
caso de Dinamarca, los votantes extranjeros han mostrado una cierta
inclinación a apoyar electoralmente posiciones de centro-izquierda.
Respecto al sufragio pasivo en las elecciones municipales, en 2006 tan
sólo un 3% de los concejales electos eran de “origen extranjero” lo que,
considerando que en esta categoría también se incluyen a los holandeses
que adquirieron la nacionalidad de forma derivativa, indica que la
presencia de los extranjeros en este espacio político es aún testimonial (a
pesar de que este número se haya multiplicado por cuatro en poco más
de una década).
Evolución de la participación política de los extranjeros no
comunitarios en los países de la Unión Europea con mayor tradición en
su reconocimiento