Página 137 - INFORME_SALUD_MENTAL_DPA

Versión de HTML Básico

135
La situación de los enfermos mentales en Andalucía. Abril 2013
10
El perfil de los enfermos objeto de este análisis, y por tanto, susceptibles
de tratamientos de esta naturaleza, ya sea en el seno de los establecimientos
psiquiátricos (mediando ingreso, voluntario o no), en el de establecimientos
sanitarios ordinarios, en el domicilio o en cualquier otro lugar adecuado, para el
caso de tratamientos ambulatorios involuntarios, admite diferenciaciones según se
trate de internamiento involuntario o tratamiento ambulatorio involuntario, mas la
doctrina suele sintetizarlo en las personas con trastorno mental severo, enfermos
mentales con escaso o nulo reconocimiento de su enfermedad y enfermos
mentales con reiterados fracasos terapéuticos (refractarios al tratamiento).
En las Jornadas de Coordinación a que nos referíamos anteriormente,
estos tratamientos fueron objeto de un análisis monográfico, en el que se sentaron
las siguientes reflexiones:
“1ª. Una primera reflexión nos lleva a poner de manifiesto el mayoritario
consenso en los colectivos familiares y profesionales a favor de los tratamientos
asertivos comunitarios frente a los tratamientos obligatorios de la enfermedad
mental, con el objetivo de reeducar y evitar así el recurso inmediato a los
tratamientos ambulatorios involuntarios.
Así pues, en línea con lo planteado por tales colectivos, antes de
plantear la posibilidad de instauración de un tratamiento involuntario en este
ámbito -lo que podría significar ampliar, aún más, el ámbito de restricción de los
derechos de los enfermos-, deberían desplegarse todos los recursos comunitarios
que la Ley General de Sanidad prevé, entre otras actuaciones más adecuadas
a los derechos de los pacientes, en cuanto a los tratamientos involuntarios, y
mediante la adopción de medidas menos restrictivas para el paciente, respetando
su dignidad y demás derechos fundamentales.
Es preciso agotar las medidas alternativas menos restrictivas al
tratamiento forzoso y coercitivo, utilizando adecuadamente todos los recursos
disponibles para rehabilitar al enfermo en el ámbito ambulatorio y de la
comunidad, como tratamientos multidisciplinares, con programas individualizados
de rehabilitación psicosocial, con una posible intervención consensuada del
profesional con el paciente, con el intento de convencerle para que consienta
éste el tratamiento, o como podría ser, también, la utilización de las voluntades
anticipadas (instrucciones previas), estableciendo los mecanismos que hagan
efectivos los derechos de los ciudadanos, incorporando aquellos aspectos técnicos
o nuevas técnicas que sean favorables al despliegue de los procesos y protocolos
de la buena actuación del momento, para que el trato sea respetuoso y puedan