Página 485 - Informe_Anual_2012

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6. LAS QUEJAS
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interno en el centro, causó heridas con arma blanca a otro menor también interno
en el centro, todo ello motivado por una discusión sucedida mientras participaban en
una actividad deportiva.
El menor víctima de la agresión precisó atención sanitaria en el hospital y tras
las pertinentes curas volvió a ser ingresado en el centro. Por su parte, el presunto
agresor fue puesto a disposición de la Fiscalía de Menores, que decretó su ingreso
en un centro de reforma.
Tras tener constancia de los hechos decidimos iniciar, de oficio, la
queja 12/2424
,
con la finalidad de evaluar las circunstancias que rodearon el incidente, con especial
referencia al deber de vigilancia y cuidado que corresponde a la Administración como
tutora y guardadora legal.
Así pudimos saber que el incidente ocurrió durante una actividad de ocio
previamente programada por el centro, con la intervención de personal educativo.
El hecho desencadenante fue una discusión entre menores, que fue rápidamente
abortada por parte del personal y sin que fuera previsible la reacción de uno de los
menores que inesperadamente utilizó un arma blanca que tenía escondida en el jardín.
Por todos estos condicionantes, y a pesar de la gravedad de los hechos, valoramos
que se trataba de un incidente aislado, ajeno a la pauta ordinaria de convivencia en
el centro. De igual valoramos como muy positiva la rápida intervención del personal
sanitario del centro, como también la asistencia en el hospital al menor herido por
parte del mediador intercultural.
De otro incidente, en este caso un conato de incendio, ocurrido en el centro “Ángel
Ganivet”, de Granada, nos ocupamos en la
queja 12/4109
. Dicho expediente lo
iniciamos, de oficio, tras conocer por los medios de comunicación que el personal de
centro tuvo que colaborar en las tareas de extinción de un incendio ocurrido en el
mes de Julio, que afectó a parte de sus instalaciones, cuando éste ya amenazaba con
extenderse al resto de dependencias. Tras detectar el incendio, el personal alertó a
policía y bomberos que se personaron de inmediato.
En las crónicas periodísticas se señalaba que el incendio fue de escasa entidad, y
afectó a un colchón y parte de otro. El fuego fue sofocado por el propio personal del
centro de menores con el uso de extintores, sin que finalmente fuese necesaria la
intervención de los bomberos que se desplazaron hasta el centro.
Nuestra actuación en la queja, como institución defensora de los derechos de
los menores, estuvo encaminada a constatar las circunstancias concretas en que se
produjo dicho incidente y las actuaciones desarrolladas por la Administración para
prevenir posibles riesgos a los menores residentes en el centro.