Página 283 - INFORME_SALUD_MENTAL_DPA

Versión de HTML Básico

281
La situación de los enfermos mentales en Andalucía. Abril 2013
17
podría ser una medida justificada en algunas de estas personas, dotando a los
facultativos de una vía añadida para prescribir y aplicar.
A lo anterior se une que sería conveniente regularlo determinándose,
en tanto que afecta a derechos fundamentales, los correspondientes instrumentos
de garantías (respeto de la dignidad personal, principio de legalidad, necesidad
de la medida, congruencia, prohibición del exceso, temporalidad y programación,
idoneidad de medios, asistencia y cuidados, participación, revisión y fiscalización)
fijándose por las Administraciones y las Sociedades Científicas los criterios clínicos
para una buena práctica.
También es necesario reconocer que presupone un abordaje integral
del enfermo y que evidencia la necesidad de mayores recursos, puesto que el
incremento de medios materiales y humanos (plazas de media estancia) haría
innecesario el recurso al TAI en muchos casos.
En todo caso pensamos que el debate sobre esta cuestión no está
cerrado.
17. 2. 5. 2. L
os
dispositivos
de
atención
en
crisis
El interesado en la
queja 01/1944
compareció para explicarnos las
actuaciones que habían sido necesarias para el ingreso hospitalario de su hermano,
enfermo mental de larga evolución:
“(...) ingresó en la unidad psiquiátrica del
Hospital Clínico de Granada con una aguda crisis mental, agresiva, producto de su
dilatada y desgraciada enfermedad. Es la novena o décima vez que se le ingresa
por tales motivos.
Para realizar este último ingreso hubo que llamar al Servicio Especial de
Urgencias del 061 y éste al 091 porque era imposible trasladarlo desde el domicilio
al hospital dado su estado de excitación y agresividad. Tras unas cuatro horas de
forcejeos, incluido consultas al Juzgado, cuatro policías (los dos iniciales que se
personaron en casa no podían) y las asistencias de una ambulancia consiguieron
reducirlo y, esposado, lograron llevarlo a la unidad de agudos psiquiátricos
del referido hospital bajo los efectos de unas brutales dosis de tranquilizantes
suministrados en toda la jornada (por la mañana, en el ambulatorio del Zaidín, ya
le inyectaron medicación y el ingreso se realizó hacia las ocho de la tarde) (...)”.
Los procedimientos utilizados para llevar a cabo el ingreso en estas
situaciones de negativa absoluta de los pacientes resultan criticados por familiares
y asociaciones de pacientes, que demandan la puesta en funcionamiento de los